VIRGENES DE DEVOCION DE MARIA DE ROZAS

Esto, no es volver a empezar ¡Dios me libre¡ Pero seguro que a algunos placentinos les interesa saber donde estaban ubicadas las Virgenes que nuestra heroina tenía por costumbre visitar cada sábado.VIRGEN DE LA CONCEPCION, a la que María llamaba su palomita, estaba en el convento de San Francisco. IMAGEN DE NUESTRA SEÑORA DEL PUERTO , PATRONA DE PLASENCIA, que todos sabemos donde está su ermita. NUESTRA SEÑORA DE LA GUIA, es una bella imagen con el Niño en brazos, de piedra que tiene su hornacina en la muralla bajo el enlosado de la Catedral. NUESTRA SEÑORA DE LA SALUD (ANTES DE LOS REMEDIOS) que está en una ermita hecha encima del cañón del puente Trujillo, aprovechando los cubos de la muralla. NUESTRA SEÑORA DE SAN LAZARO, estaba en la ermita del Cristo del mismo nombre, era de azulejos. NUESTRA SEÑORA DE LA PAZ, está en una hornacina encima de la Puerta del Sol. NUESTRA SEÑORA DE LA CABEZA, de la que tantas veces se hace mención en el libro, está en un templete encima del Puente Nuevo, también fue llamada la Virgen de los gitanos, las gitanas  como gracia a sus dolores de cabeza o de los de sus familiares, le entregaban en agradecimiento sus hermosas trenzas, yo he conocido muchas de ellas, hasta que un camión tiró el templete al rio y cuando volvió a colocarse en su sitio, nunca mas he visto trenza alguna.NUESTRA SEÑORA DE LA ENCARNACION, en el claustro de la catedral, el libro dice que se ignora el paradero de dicha imagen. NUESTRA SEÑORA DE LA GRACIA, de la Iglesia de San Francisco. NUESTRA SEÑORA DE LA O, en el hospital de la Merced. UN CUADRO DE NUESTRA SEÑORA DEL SOCORRO EN LA ERMITA DE SAN MIGUEL.Y aquí termino, el libro hace referencia a los hospitales que ella frecuentaba para ayudar a las monjitas y consolar a los enfermos, pero esto me parece menos importante

MARIA DE ROZAS (xvi) Y CREO ULTIMO

EL CONVENTO, ABRIÓ SEPULTURA, EN MEDIO DEL CAPÍTULO DONDE SE ENTIERRAN SOLO LOS RELIGIOSOS, QUE ES UNA CAPILLA QUE ESTA AL LADO DE LA SACRISTIA. AQUI SEPULTARON SU CAJA ENTRE LAS SEPULTURAS DE LOS RELIGIOSOS. Esto parecía inaudito en aquellos tiempos, pero las virtudes y aprecio en que los frailes la tenía lo hizo posible. UN DEVOTO PREBENDADO (canónigo) BIENECHOR DE LA SIERVA DE DIOS, PUSO UNA PIEDRA DE LOSA EN SU SEPULTURA EN ELLA ESCRIBIERON LOS RELIGIOSOS EL EPITAFIO QUE SIGUE EN BREVES CLAUSULAS Y ES UNA EXACTISIMA DESCRIPCION DE SU VIDA. Aqui viene la incrispción en latín, luego traducida dice así: YACE AQUI SEPULTADA DICHOSAMENTE EN ESTE TUMULO, MARIA DE SAN FRANCISCO, COMUMENTE LLAMADA LA ROZAS. FUE NINGUNA PARA SI, PARA DIOS TODA Y TODAS LAS COSAS PARA TODOS Y A TODOS AGRADABLE. MURIO EL AÑÓ DE MIL SEISCIENTOS Y OCHENTA Y CUATRO DEL MES DE ENERO A LAS CUATRO DE LA MAÑANA. Luego ya vienen los halagos y retóticas de los que el libro está lleno. Después de la Fiesta de la Epifanía, siguieron las muestras de amor del pueblo llano, de los caballeros y Cabildo Catedralicio y hace memoria de las frases amorosas  que cita San Palo a los Corintios LA CARIDAD ES PACIENTE, BENIGNA, NO PADECE EMULACION, NO SE HINCHA, NO ES AMBICIOSA, NO BUSCA SUS COSAS. Se dijeron multitud de Misas unas con magnificencia y músicos y otras mas modestas, pero todos se sintieron sin MARIA DE ROZAS un poco huérfanos. El libro sigue con la relación de los hospitales Iglesias e Imágenes de las que se citan o la venerable Madre tenía por costumbre rezar y visitar. Pues hasta aquí, mas o menos, su vida, ahora voy a dar mi opinión en algunas cosas aunque a nadie le importe, pero ya después de puesta...

¿Donde está la lápida de nuestro personaje? Yo he preguntado en mas de una ocasión, pues para aquellos que no conozcan nuestra ciudad, les diré que tras la marcha de los frailes del convento de San Francisco, este fué totalmente abandonado, la Iglesia se convirtió en teatro, para ello se quitaron los laudes sepulcrales, que al fin eran un libro pétreo de los que allí acabaron, y yo he conocido puestas estas losas como aceras en la Corredera de Alfonso VIII desde la esquina donde ahora se construyó la Central de Caja Extremadura, hasta donde hoy es correos, alguna hubo también en la calle de Santa Ana. Pues a lo que íbamos, alguien me dijo que la losa de Maria de Rozas, la habían tenido muchos años guardada una familia de la parroquia del Salvador, pero ni se que familia ni en que casa, eso es lo mas que he podido averiguar. Luego el convento fué vivienda y otra parte almacén de maderas, ahora es una sala de exposiciones la iglesia y un geriátrico el convento. Por fin he dado término a mi relato, espero que ahora sea nuestra Santa paisana mas conocida y reconocida. Y vuelvo a preguntar ¿No merecía por méritos estar en los altares? Ahí queda esa pregunta a ver quien me da una respuesta

MARIA DE ROZAS (XV)

Cuando a primeras horas de la mañana de aquel cuatro de Enero anunciaron  las campanas de la Catedral a la ciudad el fallecimiento de la Venerable madre, todo el pueblo, se volcó para ir a ver su cadáver. Los pobres, llorando a la madre que había sido su sostén. Los caballeros, el pueblo llano, todos, dicen que solo no pudieron acudir los enfermos de los hospitales y las monjitas que los cuidaban,  los niños, se decían; Vamos a ver a las Santa. Las cofradías que siempre tenían litigios por ver quienes eran los primeros en representaciones, dejaron sus pleitos a un lado e incluso fueron mezclados unos con otros. Las mujeres llevaban sus rosarios para pasarlos por el cuerpo de María, y hubo que poner órden pues todos querían un trocito de tela de su ropa para conservar como reliquia. María dejó a su confesor todo el "tesoro" que tenía, su rosario con dos medallas.La enterraron al día soguiente vísperas de la Epifanía, ya que el Cabildo celebraba fiesta grande. Voy a obviar algunos detalles, que aunque son dignos de mención, no me parecen tan importantes y voy a copiar como fué el entierro.FORMOSE EL ACTO SOLEMNISIMO Y DEVOTO CON MAJESTAD Y POMPA FUNEBRE, QUE JAMAS VIERON LOS PRESENTES, SALIO LA SANTA IGLESIA Y NOBILISIMO CABILDO MAYOR, CON AQUELLA PAUSA QUE PIDE SU AUTORIDAD, TAN LLENA DE SIRVIENTES, CAPILLA Y MUSICOS COMO ADORNAN SU CORO, FUESE ENCAMINANDO A LA ERMITA DE SAN MIGUEL EXTRAMUROS DONDE ESTABA EL DICHOSO CUERPO Y CADAVER. AQUEL TAN GRANDE EJEMPLO DEL CABILDO MAYOR, AYUDADO A LA FUERZA DE LOS MERECIMIENTOS DE LA SIERVA DE DIOS, MOVIO AL CABILDO MENOR, HERMANDAD DE SAN PEDRO (QUE UNO Y OTRA SE COMPONEN DEL MAS VENERABLE RESTO DE LA CLERECIA) A NO FALTAR A UN ACTO TAN DIGNISIMO DEL EMPLEO DE SU DEVOCION. Todos los encargados de comunicar a los conventos la mala nueva, lo hicieron de inmediato, y todos se movilizaron para enterrar a Maria. Dicen que todo el campo que circundaba la ermita esta lleno de un gran gentío. SOBRE LLEVAR LA CAJA A HOMBROS, HUBO SANTA Y DEVOTA PRETENSION EN QUE INTERVINO UNA CONFERENCIA Y CORTES LITIGIO ENTRE LOS CABALLEROS REGIDORES DE LA CIUDD DEE UNA PARTE Y RELIGIOSOS DE SAN FRANCISCO DE OTRA, AQUELLOS QUERÍAN HONRAR SU AFECTO Y SATISFACER SU CARIÑO CON LLEVAR A HOMBROS EL SANTO CUERPO, ESTOS COMO HERMANOS DE LA SIERVA DE DIOS, SE ANTEPONIAN EN LA MISMA DEMOSTRACION EL DERECHO QUE TENIA SU AMOR A PREFERIRLOS, LA CORTESIA DE LOS REGIDORES SIN ALEGAR MAS DERECHO QUE SU DEVOCION FUNDABAN EN ELLA  SU PRETENSION SANTA, POR QUE NI EL DESEO DE LOS UNOS QUEDASE FRUSTRADO, NI DESAMPARADO EL AMOR DE LOS OTROS, SACARON A HOMBROS LOS CABALLEROS REGIDORES EL SANTO CUERPO DE LA ERMITA, A UNAS GRADAS QUE ESTAN A LA PUERTA Y DE ALLI AL CONVENTO DE NUESTRO PADRE SAN FRANCISCO LE LLEVARON  LOS CUATRO RELIGIOSOS QUE ERAN GUARDIANES. ENTRANDO EN LA IGLESIA DE SAN FRANCISCO VOLVIERON LOS CABALLEROS A TOMAR LA CAJA PARA COLOCARLA SOBRE EL TUMULO QUE PARA ESTE FIN TENÍA PREVENIDO LA SANTA IGLESIA CATEDRAL, A SUS ESPENSAS CON HACHAS Y LUCES QUE CORRESPONDIAN A TAN GRAVE OFICIO Y SOLEMNIDAD FUNERAL. Un devoto capitular, pagó tods las Misas que pudieran decirse en la ciudad por la Venerable madre. Bueno me queda el entierro, espero terminan mañana

MARIA DE ROZAS (XIV)

El confesor de María, era un hombre muy inteligente. En la penúltima enfermedad, cuando todo parecía iba a terminar, y amparándose en los tres votos que había hecho al tomar el hábito de la Tercera Orden de San Francisco, de castidad, pobreza y obediencia, se acogió a este último y la mandó que le relatar toda su vida. De este modo consiguió dos cosas. Saber a fondo la primera parte y librarse del secreto de confesión de la segunda parte de la vida de nuestra María. Tres dias duró su últtima enfermedad, la atendieron solo cuatro religiosos de San Francisco, pues el pueblo entero quiso volcarse y para que no hubiera  jaleos, se acordó así. Hizo su "testamento" Maria. Encomendaba, COMO SE HABÍAN DE CUIDAR LAS LAMPARAS QUE ALUMBRABA, A DONDE HABIAN DE QUEDAR LOS VESTIDOS DE LAS IMAGENES DE NUESTRA SEÑORA DE LA CONCEPCION Y SANTA ROSA, DISPUSO QUE SE PIDIESE LIMOSNA PARA EL SANTISIMO CRISTO DE LA CRUZ A CUESTAS DE QUIEN ERA MUY DEVOTA Y PARA PAGAR LA MUSICA LOS DIAS QUE SE HACIA LA PROCESION DE LA CUERDA. EN SUMA DESDE SU LECHO IBA ENCOMENDANDO TODOS AQUELLOS OFICIOS QUE VIVIENDO ERAN SANTO EMPLEO DE SU DEVOCION. Dos días antes de su muerte, pidió el Viatíco que llevaron desde la Catedral, quisiéronle dar la Santa Unciuón, ella dijo que aún no era tiempo, la pediría cuando fuese necesario, como si tuviese conocimiento del dia y hora de su muerte. Lo pidió horas antes de que le llegase, con paz y devoción. MURIO EN CUATRO DIAS DE ENERO EL AÑO 1680, A LAS CUATRO DE LA MAÑANA, TENIENDO CUMPLIDOS SESENTA Y SEIS AÑOS DE SU EDAD.Como murió antes del amanecer, Plasencia se enteró de su óbito, al doblar las campanas de la Catedral, coo si se tratara de un Prebendado u Obispo. PUSIERON EL SANTO CUERPO EN EL FERETRO Y ESTE EN MEDIO DE LA ERMITA,SIRVIENDOLE DE MORTAJA EL MISMO HABITO QUE VESTIA, LUEGO LE HICIERON UNA CAJA DECENTE,DONDE PUSIERON EL CADAVER, ADORNADO CON GUIRNALDA COMO SUELEN A LAS VIRGENES QUE CONSERVAN SU INTEGRIDAD Y PUREZA. ARDIAN MUCHOS BLANDONES Y LUCES, QUE PREVINIERON UNOS PREBENDADOS BIENECHORES DE LA SIERVA DE DIOS. ESTABA EL ROSTRO MUY HERMOSO Y ARREBOLADO CON UN GENERO DE CANDOR RESPLANDECIENTE QUE PARECIA TRANSPARENTE, COMO EL CUERPO ESTABA TAN PURO Y LIBRE DE LOS HORRORES DEL CADAVER, LLENABA DE ADMIRACION Y TERNURA A CUANTOS LA MIRABAN. Se dice de su cuerpo.QUEDARON TRATABLES Y AMOROSOS SUS MIEMBROS CONSERVÁNDOSE ASI TODO ELTIEMPO QUE NO SE LE DIO SEPUTURA. Las hora que estuvo espuesto se consevó como si estuviese viva.

MARIA DE ROZAS (XIII)

En el Puente  Nuevo, el demonio se ensañó con María en sus tentaciones, para dfistraerla, la hacía ver gran número de muchachos, ESTOS HACIAN TRAVESURAS JUNTO A LA VENERABLE MADRE, CORRIAN Y SALTABAN SOBRE LOS LABIOS O ACÍTARAS DEL PUENTE, INQUETANDO EN SOSIEGO Y PRECIPITANDOSE A LO PROFUNDO DEL AGUA. AQUEL RIESGO LA PONIA EN CUIDADO DE ESTORBARLES LA MUERTE A LOS NIÑOS. ibase hacia ellos diciendo  MUCHACHOS, APARTAOS DE AHI, MIRAD QUE LO HE DE DECIR A VUESTROS PADRES... Y NO CONOCIA A NINGUNO. TANTAS CORRERIAS LA HACIAN A ELLA ECHARLES MANO, SIN CONSEGUIRLO"NIÑOS, POR AMOR DE DIOS, MIRAD QUE HABÉIS DE CAER, JESUS MARIA, QUE INQUIETUD. OTRO DIA SE LE PRESENTABA UNA GRAN TORMENTA CON SUS RELÁMPAGOS Y TRUENOS LA HACÍAN EXTREMECER Y LA DISTRAIAN DE SUS ORACIONES. OTRA VEZ , SINTIO GRAN GRITERIA DE GENTE QUE VENIA DE LA OTrA PARTE DEL PUENTE, COMO SUCEDE CUANDO HAY ENCIERRO DE TOROS, IBANSE LLEGANDO LOS GRITOS Y EL RUIDO DE LOS CENCERROS AL SITIO DONDE ESTABA LA SIERVA DE DIOS Y OYO QUE LA DECIAN "APARTA, APARTA, QUE VAN LOS TOROS"LOS MUCHACHOS QUE TODAVIA TRAVESEABAN LA DECIAN AYUDANDO AL ENGAÑO "QUITATE DE AHI, QUE VIENEN LOS TOROS, QUITATE PRESTO NO TE COJAN" PUDO TANTO EL ENGAÑO QUE LA HIZO LEVANTAR PRESUROSA PARA VOLVER A SU ERMITA. EN ESTA OCASIÓN IBAN DOS RELIGIOSOS DE NUESTRO PADRE SAN FRANCISCO AL PUENTE QUE ELLA DEJABA, VIENRONLA VENIR TAN ACELERADA Y DESCOMPUESTO EL PASO, LLEGARONSE A PREGUNTARLE LA CAUSA DE AQUELLA DESCOMPOSTURA, LLEVABA EL ROSTRO ENCENDIDO CON LA TURBACIÓN Y LA DIJERON ¿A DONDE VA? ¿QUE HACE? ¿COMO VA TAN CORRIENDO? -PADRES MIOS (RESPONDIO  ELLA)APARTENSE VIENEN TOROS POR EL PUENTE, DESVIENSE POR AMOR DE DIOS NO LES HAGAN MAL.LOS PADRES QUE CONOCÍAN LAS TENTACIONES QUE EL DEMONIO LE HACÍA EN EL PUENTE, LA REGAÑARON DICIENDO. MARIBOBALES, QUE NI VIENEN TOROS NI HAY ENCIERRO EN LA CIUDAD, Y VUELTA DEL SUSTO VOLVIO A LA ORACION 

MARIA DE ROZAS (XIII)

MARIA DE ROZAS (XII)

Otro dia cuando ya sus achaques no la permitian corretear por las calles, se le presentó la Virgen a visitarla, ella, lo refiere como iba vestida. EL VESTIDO ERA COMO DE COLOR PARDECILLO, TENÍA UN HERMOSO NIÑO EN LOS BRAZOS Y PUSO SUS DIVINOS OJOS EN SU SIERVA, MIRÁNDOLA ATENTA Y FAVORABLE EN AQUELLA AFLICCION QUE PADECÍA, LEVANTO LOS SUYOS LA VENERABLE MADRE Y PUSOSE A MIRAR A AQUELLA GRAN SEÑORA. SU MAJESTAD PARECE QUE LE OFRECÍA PROTECCION EN SUS PENAS Y ELLA CORRESPONDIA  CON LA OFERTA DE SU CORAZÓN PARA QUE NO CAYESE EN OFENSA DE SU HIJO PRECIOSO. Otra vez se le apareció la Virgen dando el pecho al Niño. La miró dulcemente la Virgen y el Niño dejó el pecho y la sonrió. Fué también muy devota de la Virgen de Francia QUE ESTÁ SOBRE LA ASPEREZA DE UN MONTE PELADO QUE SE LLAMA ASÍ Y DE NUESTRA SEÑORA DEL PUERTO QUE DISTA LA ERMITA COMO UNA LEGUA DE LA CIUDAD DE PLASENCIA. Estas dos imágenes se le presentaron varias veces en su ermita de San Miguel. Todos los sábados iba a la Misa que los franciscanos hacían a la Virgen Inmaculada a la que ella llamaba coloquialmente SU PALOMITA. Un sábado enferma no pudo asistir, sintió un gran dolor que la Virgen quiso consolar, y oyó desde su retito la Misa como si estuviera dentro de la Iglesia. Ya os he hablado de la devoción que tambien tenía a la Virgen de la Cabeza, que está en lo alto del puente nuevo. Poníase María enfrente de rodillas a rezarla. Pasaba la gente pero ella ni veía ni escuchaba, y los que pasaban intentaban no molestarla. VISPERAS DE LA ASUNCION DE NUESTRA SEÑORA, CONTEMPLABA LA VENERABLE MADRE EN EL MISMO PUENTE, LA GLORIA DE SU TRIUNFO, CUANDO SUBIO ESCALANDO LAS ESFERAS A GOZAR DE SU TRIUNDO. Luego, contemplo de repente como las aguas del Jerte se encrespaban, HACIENDOLA UN TRONO CRISTALINO. IBA SOBRE EL LA REINA DE LOS ANGELES POR EL AIRE HASTA QUE SE PERDIO DE VISTA.En este puente la tentó el demonio de variadas maneras para distraer su devoción, mañana seguiré, lo que pongo en mayúsculas, es copiado del libro, pues es tanto que me tiene desbordada y copiando voy saliendo del paso, lo que creí que pondría en cuatro o cinco capítulos, ya veis...

MARIA DE ROZAS (XI)

No se por que motivo se había bloqueado mi blog, he tenido que esperar a que mi hijo me solucionara el confliccto para poder seguir. Tenía María la costumbre de rezar ante las Vírgenes que hay en la calle que aquí se llamaban HUMILLADEROS por que al pasar la gente inclinaba la cabeza como acto de adoración a la Virgen. Copio. TODOS LOS SÁBADOS TENÍA MARIA POR COSTUMBRE VISITAR LAS NUEVE IMAGÉNES DE NUESTRA SEÑORA QUE TIENEN NIÑO EN BRAZOS.LA IMAGEN QUE DICEN DE LA CABEZA, QUE ESTÁ COLOCADA SOBRE LO INMINENTE DE LA PUENTE DONDE SE TERMINA LA ISLA CELEBRADA DE LA CIUDAD DE PLASENCIA, ANTE ESTA SEÑORA, RECIBIÓ LA VENERABLE MADRE SINGULARES FAVORES, COMO SE DIRÁ DESPUÉS. NUESTRA SEÑORA DE LA GRACIA, QUE ESTÁ EN UNO DE LOS LATERALES A LA MANO DERECHA DE LA CAPILLA MAYOR DE SAN FRANCISCO. NUESTRA SEÑORA DEL SOCORRO QUE ESTÁ DENTRO DE LA ERMITA DE SAN MIGUEL, NUESTRA SEÑORA DE LA PAZ, COLOCADA SOBRE LA PUERTA DEL SOL, EN LA MURALLA DE LA CIUDAD. NUESTRA SEÑORA DE LA O, AL HOSPITAL QUE LLAMAN DE SAN FRANCISCO. NUESTRA SEÑORA DE LA GUIA EN LA PARED DEL ENLOSADO, QUE CAE A LOS MESONES. NUESTRA SEÑORA DE LOS REMEDIOS, EN LA PUERTA DE TRUJILLO (Virgen de la Salud, hoy en dia)NUESTRA SEÑORA DE SAN LAZARO A LA PUERTA DE CORIA Y FINALMENTE LA DE LA ENCARNACION QUE ESTÁ EN EL CLAUSTRO DE LA CATEDRAL. A cada una le rezaba nueve salves por los nueve meses de gestación. A veces se ponía a rezary al comenzar las palabras DIOS TE SALVE REINA Y MADRE, se le paraba la voz, anegada de ternura quedándo extática por mucho espacio de tiempo. Un sábado, sobrevino tal temporarl que se vió impotente para salir de su retiro.Sentía gran pena en no poder salir, aunque lo intentó varias veces, decidió hacerlo dentro de la ermita, Y QUISO LA REINA DE LOS ANGELES PREMIAR ESTOS DESEOS, DISPONIENDO QUE TODAS LAS QUE VISITABA, SE APARECIERAN DE REPENTE EN LA ERMITA DE LA MANERA QUE SE ENCONTRABAN EN SUS CASAS.ESTE FEVOR TAN NUEVO, ARREBATÓ SU ADMIRACIÓN Y PASMADA A TANTO BENEFICIO, PERO El FAVOR, LO DISCURRIÓ CASTIGO DE SU INGRATITUD, POR NO HABER SABIDO VENCER LAS DIFICULTADES DEL TIEMPO. CUANDO MAS ENFERMA ESTABA , HACÍA DESDE LA ERMITA EL IMGINARIO RECORRIDO, AL VESE IMPEDIDA POR SUS ACHAQUES PARA HACER LAS VISITAS. Espero que no vuelv a jugarme una mala pasada este trasto y pueda terminar mi relato

MARIA DE ROZAS (X)

Yo había ya leido varias veces la vida de esta santa placentina, pero con menos detenimiento, pero al querer dárosla a conocer y estudiarla mas a fondo, me ha desbordado, (creo que os lo he dicho), pero cada vez mas. Hoy voy a copiaros textualmente, algunos párrafos, perdonar pero creo que así lo haré mejor. En el capítulo XIII, sobre la devoción a Santa Rosa de Viterbo, dice así. OYO UN DIA CON ATENCION LA VIDA Y HECHOS ADMIRABLES DE SANTA ROSA DE VITERBO, DE LA TERCERA ORDEN DE NUESTRO PADRE SAN FRANCISCO. TANTA PERFECCION EN TAN CORTA EDAD, LE ARREBATO LA ADMIRACION, VIENDO QUE LA GRACIA Y SABIDURIA DEL CIELO RAYÓ EN SU ALMA ADMIRABLES RESPLANDORES DE LUZ, ANTES QUE LA RAZÓN ROMPIESE LAS FAJAS DE LA INFANCIA.ADMIRÁBASE QUE DESDE NIÑA EMPEZASE A PREDICAR NUESTRA SANTA FE CATÓLICA CONTRA LOS ENEMIGOS DE LA IGLESIA ROMANA Y A OBRAR IMNUMERABLES PORTENTOS EN CONFIRMACIÓN DE LA DOCTRINA QUE PREDICABA, COMO FUÉ TAN NIÑA LA SANTA Y DE VIRTUD TAN EXCLARECIDA, LA LLAMABA "LA QUERIDA", ENCOMENDÁBASE A ELLA CON AFECTO CONFIADO Y DEVOTO Y EN SUS AFLICCIONES, HALLABA CONSUELO. La devoción a la santa niña fué en aumento y procuró que todos la conocieran. Trató de buscar una imagen. para excitar la devoción de los fieles. (copio de nuevo) HALLÁBASE UNA NOCHE EN LA ERMITA, ENFERMA, OCUPADA EN ATENCION A LA SANTA, QUE LAS DOLENCIAS DEL CUERPO NI APAGABAN EL AFECTO NI ANULABAN LA RAZÓN EN LOS CUIDADOS DE AMOR DIVINO. VIÓ DE REPENTE, QUE ENTRE SUS BRAZOS, SE LE APARECIÓ LA HERMOSA NIÑA, QUE CON SEMBLANTE ALEGRE LA FAVORECÍA Y EXCITABA A SU DEVOCIÓN. TENÍA SUELTO EL CABELLO, QUE DECÍA LA VENERABLE MADRE, ERA COMO MIL FLORES, ESTABA LA SANTA NIÑA VESTIDA COMO TERCERA, QUE QUISO EL SEÑOR QUE VINIERA A SUS BRAZOS VESTIDA DE LA MANERA QUE MOVIESE SU DEVOCION AMOROSA, ABRAZÁNDOLA CON TERNURA Y APRETADO LAZO. Dice después. NO SE COMO FUE AQUELLO, QUE ASI COMO VI A LA NIÑA EN MIS BRAZOS, LUEGO DIJE QUE ERA SANTA ROSA, SIN HABERLA VISTO ANTES. La trajeron una imagen de Valladolid, era tan hermosa como la visión que había tenido y una piadosa señora, se encargó de vestirla y María de hacerla una novena todos los años. Mas veces se le apareció la santita y María cuenta que una de las veces, la dió mas de mil abrazos, que la causaron gran dicha y consolación.

MARIA DE ROZAS (IX)

Tras una gran sequía, sobrevino a Plasencia una gran hambruna, los pobres se multiplicaron y las limosnas menguaron. Esto causaba gran dolor a María, muchos de los que antes la socorrían, ahora la pedían limosna, y los mas ricos tambien restringieron sus dádivas ¡menudo problema para nuestra santa¡ procuraba insistir, pero donde no hay no roban. Los conventos de frailes y monjas, socorrían cuanto podían, dando raciones de comidas, pero no daban a basto. A María los franciscanos le tenían reservada su ración, iba a por ella cada día, se sentaba en las calles o plazas y repartía o daaba su ración con los mas cercanos, luego, se ponía la última en la cola con su escudilla vacía a ver si conseguía otra para dar o compartir. uno de los días, el racionero la dijo sin mirar: Perdone hermana, nada queda. Ella, sintió en su humildad gran alegría al ser tratada como los demás, pero el fraile que vió quien era le dió parte de su comida, con lo que aquella alegre humildad quedó truncada. Otro día fué a un convento de clausura, sabía que las raciones habían terminado, pero para poder ser humillada, se acercó al torno y fingiendo la voz pidió limosna: Recibió el perdone hermana que no queda nada con gran alegría, pero al reconocerla la hermana tornera, la sacó una limosna. Corrió a confesar que era una ruin mentirosa que había intentado engañar a frailes y monjas para sacar doble ración. Cuando comulgaba los días mas solemnes, como la Navidad, la Resurrección, el Corpus, etc. era tal el ardor de su corazón que los latidos le movían el hábido y hasta hacían el ruido de su bombeo, bom, bom, bom. Juntaba las manos sobre el pecho para disimular y quedaban tan trabadas, que era imposible despegarlas. Una amiga que vivía cerca, la tomaba del brazo y la llevaba a su casa para que su humildad no se viera empañada dándose cuenta los demás. Ella en su arrobo, no sentía nada y por la calle iba como flotando sin mover los pies. ¿Cuánto le duraba? No habia tiempo. Cuando volvía en si, preguntaba a su amiga que había visto, esta le decía que solo la vió mareada y se la trajo con ella por si necesitaba alguna cosa. Como su naturaleza de por si frágil iba deteriorándose, en las noches crudas de invierno, la llevaban mantas para que se arropase, ella las rechazaba diciendo : Por el día, paso frio, pero de noche el Señor es tan caritativo conmigo que me grandes calenturas, de forma que en vez de frio ardo en calores, algunas veces creo que me voy a abrasar.

Otro día mas, y aún queda por lo menos para dos el sucinto relato de una vida tan rica en virtudes

MARIA DE ROZAS (VIII)

Un miércoles de ceniza, meditando ante el Nazareno los dolores que debieron causarle las espinas de la corona, llorando ella por tal dolor, le pidió que la enviara a ella parte de sus dolores y así aminorar el sufrimiento de aquella Divina cabeza. En la madrugada del viernes, la sobrevino un dolor tan grande de cabeza, que a ratos perdía el sentido, su confesor que presenció por la mañana el estado en que se encontraba, cuenta que debió de ser de tal intensidad que le ablandó los huesos de la cabeza, de forma que al poner un dedo sobre ella, se hundía como si fuera cera blanda: Fray Juan se asustó mucho, pensando que era el final, acudieron los demás frailes a ver el portento, sin saber si adorarla (cosa que ella no hubiera consentido, se creía la mas ruin de las criaturas) o que hacer para no turbarla. A las seis de la tarde cesó el dolor, tan misteriosamente como había comenzado. Esto se repitió todos los viernes de aquella cuaresma. Un Prebendado (así se llamaba entonces a los Canónigos) la envió su cama para que descansara, Ella al verla, se horrorizó y pedía por caridad que se llevasen la cama diciendo :¡ Ay cama de mis pecados! Si mi Señor no tuvo cuna ¿cómo yo voy a dormir en cama? Así que tuvieron que devolverla. Por órden de los frailes echaba la llave a la capilla de San Miguel que fué su vivienda. Una noche llamó a su puerta un hombre pidiendo limosna. Vestía de una manera rara, traía una túnica como de judio, un turbante en la cabeza, tenía melena y barba, estaba muy lacerado, pero su mirada era tan dulce que le recordó la de su Nazareno. Nada tenía para darle, pero al disponerse a salir, el hombre le dijo: María, lo que haces con tus hermanos los pobres, lo haces conmigo, y desapareció. Otra noche, aunque cerrada la puerta, vió ante sí a a un francicano y a un dominico, con las túnicas bastante viejas. La pidieron limosna y ella se disponía a salir aun a aquellas horas para poderles remediar. Ellos la hablaron diciendo: María , yo soy Francisco de Asís, y yo Domingo de Guzman, y desaparecieron

MARIA DE ROZAS (VII)

 Iba a comenzar la reserva del Santísimo un dia de la octava del Corpus, cuando vino un chico a decirle a María, que en la puerta había un hombre vestido con ropas raras, muy lleno de llagas y que preguntaba por ella. Aquí le venieron las dudas, de si esperar a que reservaran o acudir a la llamada. Salió, vió al mendigo y con cariño, le dijo .Hermano, son unos minutos, cuando guarden el Santísimo le atiendo. Volvió a entrar en la Catedral, a los pocos minutos salió, el hombre que la había herido el corazón al verle tan lastimado, había desaparecido y por mas que preguntó nadie le había visto, Corrió a su confesor a desahogar su amargura por no haberle socorrido, Le relató lo pasado y el sacerdote le dijo, que posiblemente habría sido una visión de lo mucho que sufrió Cristo reflejado en aquel pobre para que siguiera en su tarea de socorrer a todos y no cejar en ese empeño. En otra ocasión, cuando se acercaba la Semana Santa, meditando sobre el pánico que sufrió Jesús en el huerto de los olivos ante la muerte que le esperaba, que le hizo sudar sangre, sintió tal congoja que comenzó a sangrar por boca y nariz. Fué tan alarmante la hemorragia, que los franciscanos creyeron que le había llegado la hora de la muerte. Por mas que intentaron, no consiguieron atajar aquella sangre. Milagrosamente a las siete de la tarde, la hemorragia cesó como había empezado. Esto la ocurrió dos veces. Con la pérdida de sangre, y con las fatigas que tenía de ir pidiendo para luego buscar a los pobres para darlos las limosnas, visitar hospitalees, atender las lámparas del Santísimo, casi no descansar la aconsejaron que fuese a una ermita que había cercana a Plasencia donde había un Cristo muy milagroso, que descansase y se dedicara a la oración y meditación. Allí se encaminó y encontró paz y dulzuras, tanta fué la unión entre Jesús y su sierva, que una vez se sintió izada hasta la altura del Cristo, Este, la abrazó, y la dijo :Estamos muy agusto los dos, pero ¿y tus pobres? Ella lo entendió y salió presurosa a cumplir con la obligación que se había echado. Un frio dia de invierno, vió a una mujer descalza y medio desnuda, se quitó la camisa que llevaba bajo el hábito, las medias y los zapatos, y se los dió. Luego se agachó un pocco a fin de que su hábito le tapara los pies y no se viera que iba descalza. Entonces fué corriendo a confesar su pecado: Padre, hago honor al segundo apellido de mi padre (Zorrilla) soy una ruin zorrilla, que para que no me vean descalza me agacho y así engaño a todos... Y penzar que hoy quería terminar

MARIA DE ROZAS (VI)

María de Rozas tenía por costumbre cuando le era posible, acercarse a ver el río. Iba cerca de la pesquera que hay al lado del Puente Trujillo. El murmullo de la corriente, le parecía música y la limpieza y hermosura del agua, la hacía pensar en lo límpido y puro que debía ser Dios que creaba tan bella a la hermna agua. Se arrodillaba, inclinaba su cuerpo para ver el agua, juntaba las manos en el pecho y era milagroso que no cayera al río. Uno de esos días, se le apareció el Señor en las aguas, con una luz tan brillante, que el sol parecía haber perdido la suya. Fué un momento, pero tanto la impactó, que al levantarse para seguir su camino, las lavanderas y los que pasaban, vieron con asombro como una luz resplandeciente salía de su cara. Ensimismada como  iba, al principio, no de dió cuenta, pero al reparar que la miraban, se echó el velo que le cubría la cabeza por la cara para que no se la viesen. Un día de la octava del Corpus, fué a entrar en la Catedral, y se sintió empujada por alguna fuerza desconocida, que la sacó fuera de los escalones de la entrada, segundo intento, lo mismo, al tercero el empujón fué tan fuerte que la tiró de espaldas, lo intentó santiguándose por cuarta vez y ya no encontró incoveniente alguno. Cuando se fué a confesar, ella se creyó indigna de adorar el Santísimo, pues era gran pecadora. El padre la consoló diciendo que había sido el demonio que no quería que entrase .Otro dia de la octava vió que a la hora de comer, todo el mundo se marchaba y solo quedaban en la catedral  y los dos sacerdotes que cubrían la vela. No ´podía creer que fuera comer mas importante que adorar el Santíismo, Sintió tanto dolor su alma, que lloraba diciendo al Señor que si ella fuera digna quería llenar aquel recinto para alabarle. De pronto, vió bajar una gran número de Angeles, que se postraron cantando albanzas alrededor de la Custodia. Irradiaban tal luz, que por un momento creyó que se habían quemado los ojos, y desde aquella visión, comenzó paulatinamente a perder la vista, de forma que en sus últimos dias de vida terminó prácticamente ciega. Estoy intentando abreviar. No siempre fuéafortunada en visiones. El demonio celoso, la hizo muchas jugarretas. La dió una sequedad de espíritu en sus oraciones, que lo que  aantes había sido gozo, ahora era tedio. Cuando estaba en su capillita de noche rezando, la distría de mil maneras. Unas veces se llenaba el recinto de perros rabiosos que la amenazaban con destrozarla, otras, cuando iba a entrar se lo impedián un montón de serpientes, otras veces, se le caía el techo y podía contemplar el cielo, otras le deshacían sin saber quien las paredes y le tiraban las piedras (aunque ninguna le tocaba) pero con tal ruido y tantas voces, que aunque se tapaba los oidos, seguía oyéndolas. Pensando seimpre que sus pecados eran los causantes, se disciplinaba hasta sangrar. Por la mañana iba a confesar, y su confesor la tranquilizaba, diciendo que el camino al Cielo está lleno de inconvenientes que hay que ir salvando. Pero su salud se iba resintiendo y se le prohibieron las disciplinas. Ella cuando tomó el hábito de la Tercera Orden Franciscana, hizo voto de castidad, pobreza y obediencia, y fué obediente hasta la muerte. Mañana os contaré la cantidad de visiones que tuvo del Señor y los Santos de su devoción, hoy he puesto algunas de las fechorias que el demonio la hacía para que no perseverase en sus oraciones.

MARIA DE ROZAS (V)

Como María tuvo una vida tan rica en caridad, devoción al Santísimo Sacramento y demás Santos de su devoción, no terminaría nunca, así que voy a hacer como dos apartados para poder terminar su historia y quedarme en paz y volver a dormir. Cuando su hermana murió y dió todo cuanto poseía, se quedó en la calle, dormía en cualquier portal ( lo poco que dormía ) . No estuvo mucho tiempo, los frailes la proporcionaron vivienda en la Iglesia de San Miguel, frente a la Cruz dorada, cerca de la Isla. Se sintió feliz por que allí nadie podía verla en oración toda la noche, pero como el suelo era húmedo y frío, su confesor la obligó a arrodillarse en una estera de corcho, y allí arrimaba la cabeza a la pared o sobre un leño, dormía cada noche una media ora. Solicitó el hábito de la Tercera Orden Franciscana, le fué impuesto y no consintió que la hicieran hábito nuevo, si no que le arreglasen para ella uno de los viejos de los padres franciscanos. No se como la daba el día desí para tanto. Por la mañana temprano, se iba a los hospitales a ayudar a las monjas en la limpieza y atencionesn  de los enfermos, luego pedía en alguna casa que la pillase de paso, unas cucharadas de aceite para atizar la lámpara del Sagrario, si la sobraba, encendía una lamparilla al Nazareno de la Cruz a cuestas (ahora le veneramos en la Catedral), si aún tenía su aceiterilla algo, ponía a la Inmaculada a la que coloquialmente llamaba MI PALOMITA, le ponía otra lamparilla, (esta Virgen, se venera en las Dominicas actualmente),si no se le había agotado la materia, ponía luz también a su amado padre San Francisco, ella misma se admiraba de que le diese el aceite tanto desí. Tras la Santa Misa, iba a pedir limosna para los pobres. Llegó a tener tal arte en las peticiones que unos hombres que estaban en la calle, al verla venir, se marcharon, diciendo. Vamonos que si llega María y si no tenemos que darla, seguro que nos quitamos hasta la camisa. Nadie era capaz de negarle cuando pedia por amor de Dios para sus pobres, y en las casas mas pudientes, tenían la orden los criados de demorarse en traerla por el gusto de su conversación, cosa que a ella la dolía, primero por que perdía un tiempo y segundo por que en su interior se consideraba indigna, y se decía :Como soy Maribobales, se distraen con mis tonterías, Visitaba a los presos cuando la dejaban entrar en lka cárcel y siempre los llevaba alguna cosa, pero ellos agradecían mas las palabras de consuelo que los presentes. Una vez, vió que tenían una mujer, sujeta con cadenas por ser muy peligrosa y haber hecho muchas fechorías, Sintió tal dolor, al saber que esta condenada a ser arrastrada desde la cárcel para ser ahorcada en la plaza, que pidió ser canjeada por ella. (La cárcel estaba en la calle del Rey donde está el Ayuntamiento)

Bueno mañana sigo, por que por mucho que quiera reducir...

MARIA DE ROZAS (IV)

Me he metido en un berenjenal, que me tiene desbordada, me tiene quitado el sueño. La vida de esta santa mujer, es tan rica en milagros, que a ver si soy capaz de condensarlos, de lo contrario, en vez de un blog, voy a aburriros con un libro completo. Murió su padre siendo adolescente, fué su maestro en la piedad y  esto la causó gran dolor. La madre, había sido buena administradora, tenía algún ahiorrillo y eso las libró de quedar en la indigencia. Poco despúes murió la madre y quedaron solas Juana y María. A Juana, ya mocita, las personas que las querían, aconsejaron que debía casarse. Accedió, la buscaron un joven de buena presencia, pero no de tan buenos sentimientos. No aclara el libro, pero da a entender que bebía y se volvía sumamente violento. La emprendìa a golpes con la pobre Juana. María se metía en medio para librar a su hermana de los malos tratos, y ahí, descargaba la ira violentamente su cuñado, ella paciente callaba, pensaba que lo merecía por sus muchios pecados y que era la penitencia que Dios la enviuaba. Cuando el frío o la lluvia arreciaban, empujaba a María violentamente y la tiraba a la calle para que se enfangara en el barro. Las vecinas, la recogían, la secaban y la aconsejaban que pasara con ellas la noche, pero ella volvía a casa por si su hermana estaba en peligro. Esto lo padecieron algunos años, pero el hombre que era pendenciero, una noche peleó con otro, sacaron las navajas y al cuñado de María, le tocó la peor parte. Con un buen tajo en la barriga y medio muerto, llegó a casa. Las dos santas hermanas, se desvivieron por atenderle con todo el cariño, que no merecía, y así pasaron día y noche, Juana tenía que hacer la casa y la comida y María no se movió del lado de su cuñado tratándole con todo el amor que su alma sentía por el prójimo, El hombre, se fué ablandando al ver el de amor que le daban las que el trató tan malamente, se arrepintió y las pidió perdón antes de morir. Vuelven a quedarse solas y se vuelcan la una con la otra, hacían juntas sus oraciones y Juana la leía vidas de Santos, sobre todo de San Francisco y Santo Domingo (la sierva de Dios, nunca supo leer) Se acostaban y en cuantos María veía a su hermana dormida, salía de la cama y pasaba la noche rezando arrodillada. Una mañana su hermana, la encontro helada y sin sentido, pero con una cara de felicidad un tanto extraña. Llamó a las vecinas que la ayudaron a meterla en la cama, pensando que estaba muerta, al sentir la cama dió un brinco (pues la tenía verdadero odio) y pidió perdón por haberlas asustado. Esto ocurrió dos veces por lo que su hermana decidió que dormirían juntas. Obedeció, pero con disimulo puso una tabla debajo de la sábana para estar incómoda, pero tambiém salía de la cama para rezar en cuantos Juana se dormía y se metía en ella cuantos amanecía pra que no se diera cuenta., Luego iba a confesarse por mentir a su querídísima hermana. Pero poco tiempo despúes, también murió y quedó sola. Pensó entrar en un convento de vida contemplativa, pero no teniendo para pagar la dote, se fué a casa, dió cuanto tenía en ella a los pobres, para ser pobre por amor de Dios, y dedicarse a hacer caridades y oraciones.

MARIA DE ROZAS (III)

El padre de María, desde muy pequeña la llevaba a visitar al Santísimo despues que terminaba su trabajo, y la pequeña le cojió tal afición a esta devoción que deseaba fervientemente ver venir a su padre para hacer su visita diaria. También la niña le pedía que le contase pasajes de la vida de San Francisco de Asis,del que su padre era muy devoto, Como siempre estaba pensando en hacer sus oraciones, se distraía de los mandados de su madre, de forma que esta comenzó a llamarla MARIBOBALES. Como lo hacía como una chanza, la niña agradecía desde dentro de su corazón que su madre la humillase, pues se tenía en tan poco valor. Luego que fué algo mayorcita, se pasaba las noches de rodillas en el suelo rezando y pidiendo a Dios la hiciese buena y virtuosa. Luego iba a confesarse diciendo: -¡Que el Señor se apiade de mi, soy mala y mentirosa¡ Mi madre me queda acostada y yo la engaño, pues en cuantos siento que se ha dormido, me levanto a rezar, y luego me acuesto cuando la siento levantada para que creo que hice lo que me mandó. El confesor, quedaba prendado de la virtud de la niña, y la animaba a sus rezos, que no era malo lo que hacía, que era mejor complacer al Señor que a su madre, pero que fuese obediente. Cuando llegó a ser medio adolescente, madrugaba, se iba a los hospitales a ayudar a las monjitas a curar a los enfermos y hacer limpieza, luego se iba a su casa tan contenta. No la gustaban mucho las reuniones con las amigas de su hermana, que la tenían en gran estima por lo gracioso y edificante de sus charlas, y ella procuraba huirlas sin molestar a nadie. Decía, como soy Maribobales y medio tonta, se rien de mis cosas, a mi no me gusta por que me distrae de mis oraciones.

Mañana sigo, si puedo, me está sobrepasando la vida de esta mujer, y como el libro es un tanto enrevesado y va de atrás alante, tengo que leerlo varias veces para ponerme un poco en órden las ideas, espero que La Rozas, me eche una mano...

MARIA DE ROZAS (II)

El padre de María de Rozas, se llamaba, Juan Gómez de Rozas y Zorrilla, nació en la provincia de Burgos en el Valle de Soba. Descendiente de una distinguida familia, venida a menos. Fueron numerosos hermanos, y un tío que vivía en Valladolid, tenía una chancillería (vamos creo que era sacerdote, aunque no aclara mucho el libro) fué educado cristianamente y aprendió el oficio de bordador. Ya mozo y buscando nuevos horizonte, recaló en Plasencia que era entonces una de las Diócesis mas ricas de España. Aquí se hospedó en casa de dos señoras mayores que le tomaron gran afecto al ver el comportamiento del jóven. La madre de María era de Trujillo, se llamaba Beatriz de Xaén. Quedó jóven y huérfana por lo que decidió trasladarse a Plasencia a vivir con sus tías, que eran las patronas de Juan. Los jóvenes se gustaron desde el primer momento, por lo que las tias les aconsejaron que se casaran y así se evitaban habladurías, cosa que les pareció bien y así lo hicieron. El oficio de bordador de Ornamentos Sagrados de una Catedral, era un gran oficio, bien retribuido. Tuvieron cuatro hijos, el primero varón, que murió pronto, una niña que se llamó Beatriz como su madre, que murió muy pequeña, luego nació Juana, llamada así por su padre, y la pequeña que la pusieron María como la Virgen. El padre era un hombre muy virtuoso, bastante mas que la madre, así que enseguida se dió cuenta de las dotes de virtud con que había nacido la pequeña María. Mañana sigo.

MARIA DE ROZAS

Hoy quiero empezar, (aunque no se como voy a terminar) hablandoos de la vida, de una gran desconocida, para casi todos los placentinos. Una Santa mujer, con una vida tan llena de virtudes, milagros y caridad, que no se por que ha sido tan olvidada, pues con menos motivos,  (creo yo y que me perdonen los Santos) veneramos Santos en los Altares. Ya en vida fue reconocida por todo el pueblo su amor a Jesús y Maria y la caridad hacia los necesitados. Yo conservo un libro que siempre ví en casa de mis padres, y creo que hay muy pocos en Plasencia, titulado; VIDA DE LA VENERABLE SIERVA DE DIOS MARIA DE SAN FRANCISCO, LLAMADA COMUNMENTE LA ROZAS. Parece mentira que en una vida, se puedan hacer tantas cosas. El libro, lo transcribió Don Esteban Ginés, en 1904, que  siglos antes había escrito uno de sus confesores, Fray Juan Albín en 1682. Don Esteban estaba en esos años en Tortosa, era placentino y aquí fundó el Seminario Menor en la calle de Las peñas, frente a donde yo viví unos cinco años y desde nuestro balcón veía jugar a los seminaristas, que aquí en Plasencia se conocían con Los Estebitas. El libro, es algo enrevesado de leer, pues no sigue una cronología muy ajustada, mezcla los años de la vida de María de Rozas, de manera que hay que releerla para poner un poco las cosas en su sitio, al menos, así lo entiendo yo, por lo que no se como saldré de este fregado en el que voy a meterme, pero que esta santa paisana me ayude a darla a conocer, que es muy digna de ser recordada y admirar sus muchas virtudes y milagros. Mañana sigo
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