viernes, 28 de septiembre de 2018

PLASENCIA MUY BENEFICA (II)

La máquina del tren, tenia que repostar y paró en Plasencia, en via muerta para causar menos problemas. La señora Isabel, La Cabrera, iba todas las mañanas al amanecer a ordeñar sus cabras cerca de la estaciónm, al pasar derca del tren, orço voces lastimeras que la paryieron el alma ¡Agua, agua¡f pedían aquellos desgraciados y enfermos. Ella agua ,no llevaba, peo si la leche recien ordeñada de sus cabras. No se lo pensó dos veces, subió al tren y mitigó a cuantos pudo la sed con la leche de su cantarillo. Llegó a la Calle Ancha, donde tenía su domicilio y convocó a sus vecinas, que eran como una granfamilia. Les explicó el caso y pensaron aquellas aguerridas mujeres, que podían haber sido sus hijos, hermanos o sobrinos. Juntaron lo que pudieron de agua y alimentos, se hicieron tiras de algunas sábanas para vendas con qye curar las heridas, y se encaminaron a la estación. Pero aquella labor las desbordaba. No se amilanaron, se dirigieron al Ayuntamiento a pedir ayuda a las autoridade, pidieron ayuda a los ricos placentinos. En rodos caló la petición. Plasencia se puso en marcha para llevar comidas, y curar aquellas heridas del cuerpo y del alma, particulares y sanitarios cada uno hizo su labor, y tras los tres o cuatro dias que el tren estuvo aquí parado, pudiooeron bajar a tierra los mas sanos y mejoraron mucho los heridos y enfermos. Ya limpios y aliviados marcharon a sus destinos. La Cruz Roja y las autoridades,  hicieron llegar la noticia a la Reina Cristina regente por la minoría de edad de su hijo, el rey Alfonso XIII, que tuvo a bien el otorgar el título de MUY BENÉFICA, (del que nos sentimos orgullosos los placentinos, sobre todo, las placentinas) pues con el altruismo de nuestras mujeres, que fueron capaces de tal gesta lucimos los títulos de MUY NOBLE, MUY LEAL Y MUY BENEFICA (este título que tanto nos honra lo poseen muy pocas ciudades. El acto del lunes, sencillo y emotivom, resultó muy emocionante, asistieron algún bisnieto de alguna de estas mujeres, y sobrinos bisnietos los mas numerosos. Yo fuí en representación de mis hijos, al no estar aquí ninguno ya que son sobrinos bisnietos de RAFAELA CALDERON. Como soy muy aficiuonda a escribir, compuse unos versos en su honor, que leí para realzar la gesta de estas heroicas mujeres. La poesía es algo larga. No se si lka ponfré mañana. No me gustaría cansaros  mas.
gracias por leer mis escritos, si tuvisteis la paciencia de llegar hasta aquí,m, gracias

jueves, 27 de septiembre de 2018

PLASENCIA MUY BENÉFICA

El pasado lunes 24 de Septiembre 2018, se homenajeó a un grupo de heróicas mujeres que con su caridad y valentía, asistieron a los soldados que venía derrotados y enfermos de la guerra de Cuba.
Los nombres de estasd mujeres y por orden alfabético son ;DIONISIA, LA MAÑA/EDUARDA BORDALLO/ISABEL MORENO/ ISABEL LA CABRERA/ LEONOR CONOJERO/LEANDRA MELO/ LEANDRA ROVIRA/ MARIA CANO/ RAFAELA CALDERON/ SANDALIA PEREZ/VICTORIA ADAMO. Estos nombres quedarán en nuestra historia grabados en oro. No qusiera ser pesada, pero para poneros un poco en situación, os cuento. Plasencia fué fundada por el Rey Alfonso VIII de Castilla, en el año 1186. un poco enamorado del maravilloso enclave y otro poco para que dada su situación estratégica, sirviera como de muro de contención a la escalada hacia el norte de los moros. Nos dotó de grandes privilegios unos fueros, muy adelantados para su época. Nos concedió como ciudad de realengo un bello escudo, formado por una torre y a los lados un pino y un castaño, le remató con corona real y escribió (para mi) el mas bellos "mote" que se pueda dar. En latín... yo lo pongo en español, ya traducido PARA QUE PLAZCA A DIOS Y A LOS  HOMBRES. Como ciudad de realengo le otorgó tambien el título de MUY NOBLE.mas tarde y por motivos que no vienen a caso y por no alargarme, el rey FERNANDO EL CATOLICO, el de MUY LEAL. Ahora voy a el emotivo acto de el Lunes. Una de las descendientes de estas mujeres PEPITA PLATERO, ha tenido el tesón de buscar los nombres de estas doce mujeres y solicitar con empeño, hasta conseguir del señor alcalde (que dicho sea de paso) siempre está dispuesto a engrandecer a su pueblo, que se instalara un gran mural de azulejos con los doce nombres, y por elko se consiguió de la Reina Regete por la minoría de edad de su hijo Alfonso XIII el título que mas nos honra y enorgullece a los placentinois de MUY BENÉFICA. Me parece que me he pasado y no voy a poder relatar con detalle como yo quisiera esta gran gesta. Venían los trenes con su s heridos y enfermos desde Vigo, para llevar a estos soldados a sus destiios. Era un tren considerado maldito, pues los que en el venían, (que habían dado todo por defender a su Patria), estaban heridos o enfermos con malaria y otras enfermedades contagiosas y desconocidas, por lo que no les dejaban parar en ninguna estación, y en algnas fue apedreado el tren. En Plasencia hubo de parar para repostar la máquina y aquí  me quedo, mañana os cuento la hazaña de estas mujeres placentinas

viernes, 7 de septiembre de 2018

LA SEÑÓRA TECLA

Cuando yo era pequeña, vivíamos en la calle de las Peñas. Yo vivi en esa calle de los cuatro a los seis años. Era un pisito muy bonito con un gran balcón a la calle ,(me da mucha alegría pasar por allí pues se conserva la fachaca tal cual.) Solo ha cambiado la terraza de arriba, que la barandilla la han cerrado, se ve que vivien niños traviesos y la verdad era peligrosa la barandilla de ladrillos que  la formaba haciendo unos grandes rombos. El piso. tenía un pasillo a la entrada de una de las puertas, un cuartito donde mi madre tenía el taller con salida al balcón, un gran comedor que salía también al balcón, una gran habitación que mi madre tenñia dividida con una cortina de separación entre su dormitorio y el nuestro. Mi madre nos dejaba dormidos a cada uno en su cama, pero siempre amanecíamos los dos hermanitos juntos, casi siempre en mi cama pues Berna era mas pequeño y yo su protectora un año mayor que el. Nos adorábamos y éramos inseparables. Luego está la cocina con un armario esquinado  de madera  que servía de despensa y el excusado(solo tenía el retrete), Me voy enrollando y  no quisiera. La veciundad, era como una gran familia, las puertas se abrían por la mañana y no se cerraban hasta que nos íbamos a dormir. Unas casas mas allá de la nuestra, vivía la señora Tecla, Era una mujer delgada, alta y debió ser guapa en su juventud. No se si era viuda o soltera, para lo que os quiero contar de ella en forma de homenaje, nada importa. Vestía con manteo negro igual que su jubón y pañuelo, una faldriquera de pana negra y un mandil, tambien negro con florecitas menudas blancas, o listas, Tenía un moño trenzado en la nuca. Siempre impecable. Su primer oficio fuera de la casa, era ir a peinar a dos ancianitas que por sus achaque no podían hacerse el moño. Cumplida esta obligación estaba dispuesta para ayudar a quien la necesitaba. Que un muchaco jugando a las barallas son piedras se hacía una gran pitera, por la que sangraba abundantemente, pues todos los chicos en procesión llevábamos al herido a casa de la señora Tecla a que le curara para que su madre no se asustara o le propinase una ración de azotes. Yo la vi alguna vez, poner una aguja de coser a la luz de una vela (sería para desinfectarla) y con hilo blanco y gran destreza hacer un punto de sutura, Luego vendaba la cabeza con vendas que hacía de sábanas viejas y acompañaba al herido a su casa para evitar el castigo materno y para que le pusieran una camisa limpia.Que algun chico se caíam se hacÍa una "mataura" mas o menos grande, ella se la curaba. Si algún chaval tenían fiebre sin saber de que (a lo mejor de comer alguna fruta robada a un árbol sin estar madura), la señora Tecla acudía con su botella de aceite de ruda y otra de aguardiente. Los daba unos sobaos en la barriga y en las muñecas con aquel aceite milagroso, ñlo ponía boca abajo, tomaba ella un buche de aguardiante que espurruchaba en los riñosnes del enfermo, y mano santa. El chico empezaba a evacuar sin parar y al dia siguiente , bueno. Que alguna parturienta se la ocurrían dar a uz a horas intespectivas; Ir a buscar a la Señora Tecla, y ella se encargaba de atender el parto y mas de una vez cundo llegó la comadrona, estaban perfectamente atendidos el niño y la madre. Que alguien moría, allí estaba la señoran Tecla para ayudar a amortajar  el cadáver y consolar a los familiares., Luego desaparecía para volver con una gran jarra calentita de tila. Vamos, una mujer todoterreno. Una Santaa sin corona que pasó por el mundo haciendo el bien y que se merecía un homenaje, que yo hoy le quieron rendir, Luego nosotros nos cambiamos de casa pues venía otro niño de camino y el pisito no daba para mas familia. No se ni cuando ni de que murió, pero siempre la he recordado, Pero ahora llevo unos dias con una verdadera obseción de contar al mundo lo   poco que se y recuerdo de aquella santa mujer que se llamó LA SEÑORA TECLA