, sin muchos ánimos que digamos, ni de salir, ni de asociarme a nada. Tengo unas amigas, estupendas que habían empezado algún curso. No solo me animaron, si no que casi me obligaron a matricularme, se encargaron del papeleo, yo solo firmar y pagar la matrícula. Lo hice para no defraudarlas en su empeño, pero con poca o ninguna ilusión. Desde el primer día, me encontré tan bien, tan acompañada, y eso que a la mayor parte de los compañeros no los conocía, pero es una convivencia tan entrañable que te engancha. Yo pensaba, esto de la Universidad, es como un "aparcaviejos" para tenernos distraidos, Craso erros, los profesores, estupendísimos (así en superlativo) llevan las clases preparadísimas, y si les interrumpes con alguna pregunta (que algunas se las traen) interrumpen su disertación y responden hasta que quedas bien informado. Yo algunas cosas tenía idea, de la mayor parte no. No tengo estudios de ninguna clase, fuí a escuela hasta los 12 años, pero he sido una lectora impenitenten y me ha gustado siempre escribir poesías, cuentos, en fin, la literatura, pero nuestras clases son mucho mas que eso, tenemos derecho, administración, un jovencísimo profesor el año pasado hasta nos enseñó a hacer la declaración de la renta y a desgravar cosas que ni se nos hubiera ocurrido sin su asesoramiento,historia del arte, de la música, de las civilizaciones, en fin que ahora, yo personalmente, se como se debe mirar un cuadro o de que época es una Iglesia o una imagen románica, Perdón me he estendido en demasía, pero lo que he pretendido, no es aburriros si no animaros a no quedaros en casa sentados, que hay que aprender a vivir solos y si se puede a sacarle algún partido a la cabeza, sobre todo por huir del alzeimer (no se si está bien escrito), Gracias
martes, 22 de octubre de 2013
COMO EMPECE A IR A LA UNIVERSIDAD DE MAYORES
A lo mejor no le interesa a nadie. pero si con mi experiencia, puedo animar a alguna persona que se encuentre sola, que venga a la Universidad de Mayores, allí encontrará, cultura, estupendos compañeros y no se arrepentira. Los mayores tenemos la idea errónea de que de nada nos va a servir ir a clase, total a nuestra edad... Yo me quedé viuda a los 80 años, la enfermedad de mi marido, fue de esas que aparentemente encuentras a la persona en la calle con cara saludable y parece que no tiene nada mas que salud, pero estar junto a él las 24 horas del día sin saber como y cuando le iban a dar sus eternos mareos, (que que hubo algunos de mas de seis horas sin conocimiento), mirando a ver si respiraba, ya que me habían advertido que de uno de esos no volvería. No se por que cuento esto, será a modo de introdución, para animar a todos. Como antes digo, me quedé viudad
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Esta "joven" María Magdalena, es un ejemplo a seguir... La prueba viviente de que ilusión y tesón unidos pueden con todo. ¡¡Gracias por ese entusiasmo tan contagioso!!!
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